Tu bebé está empezando a comprender muchas cosas acerca de cómo funciona su mundo. Algunas de estas cosas te pueden parecer muy básicas, ¡pero para tu bebé son grandes descubrimientos! Un ejemplo es el de la “permanencia de los objetos”, o comprender que un objeto continúa existiendo incluso si desaparece de su vista. Por esta razón el juego de ¡no está! ¡sí que está! (o ¡cucú!, ¡tas tas!) es uno de sus favoritos. Antes se sentía nervioso cuando tú no estabas (incluso si simplemente te tapabas el rostro con las manos); no comprendía dónde te habías ido. Pero ahora sabe que cuando te cubres la cara, sigues estando allí y le encanta descubrir que está en lo cierto cuando te quitas las manos del rostro y le dices: ¡sí que está! Puedes jugar una variación de este juego cubriendo un juguete con una mantita o escondiéndolo detrás de tu espalda durante unos segundos.
De forma similar, si tu bebé dejar caer un juguete o su chupete fuera de la cuna, mirará el suelo para ver si lo encuentra, mientras que antes lloraba porque ese objeto se había ido “para siempre”. Este es otro increíble adelanto de tu bebé. Ya no es un recién nacido completamente indefenso, sino un bebé mayor, con más habilidades cada día.
















